THE DEATH ROAD... LA CARRETERA DE LA MUERTE EN BTT

Nos conovcaron a las 7 de la mañana en el comedor del hostel para recibir un desayuno bastante potente a base de mate, 2 panes con mermelada, un sanwich calentito de jmon y queso, jugo de naranja embotellado y cafe. El silencio reinaba en el recinto, solo unos clincs retumbaban al chocar las cucharilas contra las tazas. Legañas pegadas en los ojos y marcas de sabanas en las mejillas. Poco a poco llegaba el resto del grupo. En total 11. Un pasame la mermelada, por favor! era lo que poco a poco rompia esa frialdad con la que nadie hablaba. Un suizo y un argentino mis camaradas. Los demas a su bola. Al rato llegaron Chelo (Marcelo) y Harry (un tipo aleman que se quedo aca) nuestros guias. Nos repartieron el equipo: guantes, casco, mallot, pantaloncito con acolchado para el culo y chompa para el viento y el agua. Nos pusimos en marcha. Llego la combi con las bicicletas cargadas en la baca. Medio apretujados dentro del carro, y no es porque no hubiera asientos, sino porque son re pequeñas estas mobilidades, nos dirigimos hacia La Cumbre, a 4.700 m. Vestiditos, pero con los pantalones largos, nos repartieron las bicicletas. Las habia de diferentes precios, eso era segun el precio que pagamos. Yo me quede la mas barata, costaba 300 bolivianos, pero se enrollo el señor de la agencia y me lo dejo por 280 bs. La diferencia consistia entre frenos mecanicos o hidraulicos y las suspensiones delanteras o delanteras y traseras. El precio maximo, si no mal recuerdo era de 460 bs. Listos cada uno en nuestras maquinas, no hicimos las fotos de rigor. Los guias eran los encargados de llebar una camara y hacer fotos y videos, que al final del tour, nos regalaban un CD con todo el material visual.

Empezamos a descender por carretera asfaltada. Pura bajada. Pedaleo 0. los frenos trabajaban a tope, pues la bicicleta no inspiraba mucha confianza. Al rato, un chico coreano pincho. Menos confianza. Mi bici se mobia demasiado. Primera parada, alli cambie de bici. Nos hicimos unas fotos con un fondo espectacular del valle. Continuamos cuesta abajo cuervas y mas curvas. Hasta llegar a un puesto de "Control de Narcoticos". Pasamos tranquilamente y continuamos hasta el siguiente control donde teniamso que pagar 24 bs de permiso de circulacion.

Parada para un tentempie a base de agua, platano y chocolatina. En el siguiente tramo nos esperaba una subidita asfixiante, alli estabamos a 3.500 m un rato a pie otro en bici, tanteando la dificultad. Otra bajada, otra parada, unas fotos y seguir. La siguiente subida me la chupe, alli jugue bien con las marchas y tranquilamente, sin prisa, llegue.

Empeiza el camino de tierra. Nos paramos y alli, Harry, nos presentos. Amigos, este es el balcon y aqui empieza la Carretera de la Muerte. Me hubiera gustado verme la cara. Os recuerdo que en esta carrtera antes circulaban camiones y buses. Empezamos a desender, pedaleo nada de nada, al contrario, tengo los dedos corazon y anular fuertisimos, como para irme a escalar y sacarme los bi dedos silbando. Y los frenos? pues cuando paraba casi que me podia encender un cigarrllo con ellos.

La vistas son impresionantes, los precipícios que no te abandonan en ningun momento del primer tramo, son vertiginosos. Cortes verticales perfectos. Caidas de... me arriesgaria a decir que de unos 1.000 m. Pero quien fue el loco que dejo que circularan vehiculos por alla? esa era la pregunta que retumbaba en mi cabeza. No podia creer en cada metro que recorria, que esa carrtera era abierta al publico en general.

En difinitiva el tour fue precioso, aunque bastante montado. Nos hacian parar, pasaba Chelo y cuando reemprendiamos el viaje, nos lo encontrabamos en un punto estrategico sacandonos fotos o haciendo videos. Pero bueno, era la unica manera de tener un recuerdo de esta hazaña. Pasar por debajo de cascadas, cruzar rios, ufffffffffffff que aventuron.

La calor marcaba que ya estabamos por debajo de los 2.000 m. Ya faltaba menos para llegar a nuestro destino: Coroico. Bajamos los ultimos 10 minutos llegando a una pequeña poblacion (no recuerdo el nombre) Alli cargamso las bicis a la combi, tomamos una cervecita y en vehiculo subimos a Coroico, al Hotel Esmeralda. Alli nos duchamos y almorzamos de bufe libre a base de: pollo, lentejas, arroz, ensalada y mate o cafe; tanto como quisimos, entraba en el precio. En total descendimosen 4 horas y media, descansos incluidos, y regresamos a La Paz en otras 4 horas.

Al llegar, no sabia si estaba mas cansado por el descenso o por la combi, que manera de aprovechar el espacio.

Por lo demas, hoy solo me queda descansar un poquito.

Besitooooooooooooss

PERI

PD: El tema fotos esta complicado, no encuentro un lugar con linia rapida, todo es lento, sin prisas, no me estreses que esto no es europa. El dia que pueda que sea una sorpresa. Muas